Nosotros

Sobre mí

El plural, como el lector imaginará, es un eufemismo: esta es una página personal. Así que aquí estoy yo, para comenzar contándoles sobre mí y mi vida.

Y yo ¿qué? Una historia de privilegios

He nacido en Uruguay, pero hace ya más de treinta años que vivo en Europa, y 25 en España. Mirando mi vida, encuentro que he podido disfrutar de una serie de privilegios. También las he pasado mal, incluso muy mal, pero aquí quiero contaros sobre lo positivo, que me trae hasta este relato.

Mi nacionalidad europea

Soy inmigrante, y también nieto, hijo, padre y abuelo de emigrantes. MI padre partió del campo portugués, de un pueblito muy cercano a España, hacia la Argentina, y unos años después al Uruguay. Mis abuelos maternos emigraron desde Galicia y León. Yo adoré a mi padre, y por extensión a su país. Adopté su nacionalidad, y estudié su idioma (mucho antes de imaginar siquiera que algún día vendría a Europa), como homenaje.

Uno de mis privilegios ha sido nacer y crecer en un país en el que la educación de la que pude disfrutar fue, y sigue siendo, pública, laica, gratuita y obligatoria. Otro privilegio fue que mis padres me enviaron a estudiar inglés cuando cumplí 7 años, y francés dos años después. Nunca les estaré lo suficientemente agradecido…

Primeros años profesionales

Aprendí sobre la vida laboral al empezar a trabajar con 17 años, poco antes de terminar los estudios preparatorios para la Universidad. Era un trabajo administrativo, cuyo mayor interés era que se trataba de un servicio público, aunque lo daba el Sindicato Médico del Uruguay, y los compañeros que tuve. Eso duró once años, pero casi simultáneamente a ese trabajo comencé el que realmente me iba a marcar para el resto de mi vida: el periodismo, y en particular el periodismo musical.

Antes de venirme a Europa, trabajé durante veinte años en diferentes emisoras de radio, trabajando también en ocasiones para la prensa escrita y la televisión. Pero la historia es algo más compleja. Por un lado, con la música no ejercí sólo el periodismo, sino que desarrollé todas las actividades posibles alrededor de la música: crítica, producción de discos y espectáculos, presentador, promotor, jurado en certámenes, corresponsal extranjero, etc. Por otra parte, también dediqué unos años – durante los más duros, los de la dictadura que siguiendo la inspiración de la Operación Cóndor, golpeó a Uruguay un poco antes que a Chile – al periodismo de información general, en radio.

30+ años en Europa – a estudiar

Vine a Europa a estudiar. Yo había hecho un par de años de sociología y colaboraba como investigador asociado en un centro docente no público, que fue refugio de excelentes profesores e investigadores durante la dictadura uruguaya de los años 70. Ese Centro Latinoamericano de Economía Humana tenía un acuerdo con la Universidad Católica de Lovaina, lo que me permitió venir a Bélgica a estudiar lo que realmente quería: comunicación social.

Poder estar en Bélgica, en Lovaina, fue otro de mis privilegios: allí disfruté de un entorno de estudio, investigación y aprendizaje extraordinarios. Ese entorno, y una familia que me apoyaba, permitieron que completara una Licenciatura en Periodismo, y más adelante, un Doctorado en Comunicación Social.

Trabajar en Europa

Poco antes de defender mi tesis doctoral tuve otro privilegio: hacer unas prácticas en la Comisión Europea, y que éstas no solo fueran en la Dirección General de Información, Comunicación y Cultura – coincidiendo entonces con mis estudios e intereses –. También tuve la enorme suerte de trabajar en el embrión de un nuevo programa europeo que se convirtió con el tiempo en un fundamental apoyo al desarrollo de la industria audiovisual europea: MEDIA.

También tuve suerte al trasladarme a España. Después de un año de trabajar como consultor especializado en el sector audiovisual, fui contratado por la agencia de desarrollo económico de Madrid, el IMADE. Me encargaron diseñar y crear un programa de apoyo al audiovisual madrileño. Unos años después este proyecto naufragó ante la incompetencia y desinterés de políticos diversos. Pero cuando tuve que abandonarlo, me ofrecieron lo mejor que podía encontrar: el Centro Europeo de Información Empresarial. Aquí estuve, y lo dirigí, siete años. En todo ese tiempo contribuimos a preparar  a las PYME madrileñas a la llegada del Euro, a la mayor ampliación que vio la Unión Europea, a diez países al mismo tiempo, y a ayudar a las pequeñas empresas a mejorar sus relaciones con colegas de otros países, europeos y latinoamericanos.

Del Departamento Internacional de IMADE pasé a comienzos de 2005 a PromoMadrid, una agencia dedicada a la promoción económica internacional de la Comunidad de Madrid. Aquí, nuevo giro del destino, regresé a mis primeros intereses, pues dirigí el Departamento de Industrias Culturales. Ayudé, en un entorno de presupuestos decrecientes anualmente, sobre todo a las industrias del audiovisual, de la música y en menor medida, del sector editorial y del de videojuegos, a exportar, y en general a desarrollarse internacionalmente. A comienzos de 2013 el Sr. González, Presidente de la Comunidad de Madrid, consideró que lo que hacía PromoMadrid no era de utilidad para la región, y lo cerró.

Sobre cómo apareció Equo en mi vida y qué pasó después

Fue a finales de 2010. Equo estaba dando sus primerísimos pasos, se había constituido como Fundación, y tuve la suerte de encontrarme con una entrevista en televisión a Juantxo López de Uralde. Tanto nos interesó a mi mujer y a mí que inmediatamente fuimos a buscar la página web de ese proyecto nuevo del que había hablado, de nombre tan raro como atractivo: Equo. En aquella página encontramos una magnífica idea: se nos proponían doce ideas sobre temas diversos. Si nos gustaba una, teníamos que comprometernos con 10 euros. Pues vimos que las doce nos hacían vibrar: más que compartirlas, encontramos en ellas la orientación política que tanto nos había faltado desde hacía mucho tiempo.

Ese fue el comienzo de una relación en la que sigo aportando todo lo que puedo, constituyendo otro claro privilegio, que trato de transmitir en cada ocasión que se me presenta: lo que Equo me ha aportado: una ilusión renovada, unos ideales reencontrados, unos compañeros que son un lujo.

Historia de este blog

A finales de 2013 Equo convocó no sólo a sus afiliados y simpatizantes sino a todos los ciudadanos españoles (y residentes de otras nacionalidades) mayores de 16 años para construir entre todos las listas para las elecciones europeas de mayo de 2014. Esta página web nació para presentar mi candidatura a esas Primarias Abiertas; una vez superada la Primera Vuelta sin haber llegado a pasar a la Segunda, pero con una honorable quinta posición entre los hombres, el compromiso continúa.

Mis lectores

No pueden ser sólo lectores: cuento con que asuman un papel activo, tanto debatiendo como preguntando como, si así les parece, difundiendo lo que aquí diga. El debate es elemento troncal de la manera de ser de Equo. Es cierto que muchas cosas de las que aquí escriba no serán necesariamente opiniones, o propuestas o posiciones que deban confrontarse con las de mis lectores, porque, como digo en el acápite, también cuento contribuir con información. En cualquier caso, cuento con la interacción, con vuestra palabra. Para oponer, para comparar, para alentar. Siempre con las buenas reglas de la conversación constructiva. Efectivamente, se trata de construir entre todos una Europa - un mundo, vaya ambición! - distinto, en el que entre todos hagamos lo que en este momento resulta tan difícil. Equo apuesta por demostrar que otras maneras de hacer política son posibles. Este blog, que sólo me compromete a mí, quiere sumarse a esa tarea.